viernes, 19 de marzo de 2010

El pie de limón

Tengo un secreto. Los pie de limón se llaman así porque hace mucho tiempo los limones eran como nosotros los seres humanos, se movían, hablaban, vivían y... sabían bien, excepto sus pies. Las personas los cazaban día y noche. Hasta que solo quedó un limón viviente en la tierra. Los humanos hicieron una conferencia para deliberar qué harían con él. Querían seguirlos comiendo durante años y solo quedaba uno. Lo encerraron y enfermó de tristeza, terminando por suicidarse, pero antes, se cortó los pies y los encantó para que fuese lo único que comiésemos de ellos, lo más detestable. A mí me parecen muy ricos. Imagina cómo sería el limón entero de verdad.